El gran Tao es como río que fluye en todas las direcciones.
Todos los seres le deben la existencia y él a ninguno se la niega.
Cuando realiza su obra, no se la apropia.
Cuida y alimenta a todos los seres sin adueñarse de ellos.
Carece de ambiciones, por eso puede ser llamado pequeño.
Todos los seres retornan a él sin que los reclame, y por eso puede ser llamado grande.
De la misma forma, el sabio nunca se considera grande, y así, perpetúa su grandeza.
Lao Tse - Tao Te King