Nikola Tesla aparentemente tenía una enemistad con Thomas Edison. Después de trabajar varios meses mejorando los diseños de los generadores de corriente continua, y mientras le brindaba varias patentes que Edison registraba como propias, éste se negó a pagarle los 50.000 dólares que le había prometido si tenía éxito (a pesar de usar las mejoras), aduciendo que se trató de una "broma estadounidense", e incluso se negó a subirle el sueldo de 18 a 25 dólares a la semana.
Edison propició la invención de la silla eléctrica, que emplea corriente alterna (desarrollada por Tesla) en lugar de corriente continua -de la que él era impulsor- para así dar mala fama al invento del europeo. Harold Pitney Brown fue el inventor de la silla eléctrica. Ésta fue utilizada por primera vez en Nueva York el 6 de agosto de 1890. Fue contratado por Thomas Alva Edison para que le ayudara a desarrollar la silla eléctrica, después de haber escrito en una editorial para el New York Post donde describía cómo un hombre joven murió después de tocar accidentalmente un cable telegráfico que usaba corriente alterna en contra de los planteamientos de Nikola Tesla.
Edison, con el sistema de corriente directa, competía con la compañía eléctrica Westinghouse, que usaba corriente alterna. En 1886 el Estado de Nueva York estableció un comité que determinara una nueva forma de ejecución más humana para reemplazar el ahorcamiento. Ni Edison ni Westinghouse quisieron que sus respectivos sistemas fueran elegidos porque temían que los consumidores no quisieran que el mismo tipo de corriente eléctrica usada para matar criminales se utilizara en sus hogares.
Fuentes:
La leyenda en torno al genio
Nikola Tesla
Thomas Alva Edison
Harold P. Brown
Edison propició la invención de la silla eléctrica, que emplea corriente alterna (desarrollada por Tesla) en lugar de corriente continua -de la que él era impulsor- para así dar mala fama al invento del europeo. Harold Pitney Brown fue el inventor de la silla eléctrica. Ésta fue utilizada por primera vez en Nueva York el 6 de agosto de 1890. Fue contratado por Thomas Alva Edison para que le ayudara a desarrollar la silla eléctrica, después de haber escrito en una editorial para el New York Post donde describía cómo un hombre joven murió después de tocar accidentalmente un cable telegráfico que usaba corriente alterna en contra de los planteamientos de Nikola Tesla.
Edison, con el sistema de corriente directa, competía con la compañía eléctrica Westinghouse, que usaba corriente alterna. En 1886 el Estado de Nueva York estableció un comité que determinara una nueva forma de ejecución más humana para reemplazar el ahorcamiento. Ni Edison ni Westinghouse quisieron que sus respectivos sistemas fueran elegidos porque temían que los consumidores no quisieran que el mismo tipo de corriente eléctrica usada para matar criminales se utilizara en sus hogares.
Fuentes:
La leyenda en torno al genio
Nikola Tesla
Thomas Alva Edison
Harold P. Brown